Cómo discutir la seguridad corporal con niños, noticias de estilo de vida

Escuchar un caso de abuso infantil en un lugar de confianza, como un centro de cuidado infantil, es una pesadilla para todos los padres.
Entonces, ¿cuál es la mejor manera de hablar con nuestros hijos sobre este tema, para que puedan sentirse más seguros y protegidos?
Si bien es imposible eliminar el riesgo de abuso, existen formas prácticas y apropiadas de edad para ayudar a los niños a creer en su intuición y hablar.
Las discusiones sobre este tema se pueden mantener relajadas, ya que el objetivo es enseñar a los niños sobre la seguridad corporal, la autoestima y la confianza, sin dudarlo.
Aquí hay algunos pasos simples que los padres y los tutores pueden tomar para ayudar a los niños a comprender este tema, así como algunos recursos que pueden ayudar a fortalecer su comprensión.
Use el nombre real para las extremidades
Muchos de nosotros somos criados en familias que usan títulos específicos para miembros confidenciales o no los discuten en absoluto.
Las funciones básicas del cuerpo a menudo se consideran vergonzosas o se usan como chistes.
Sin embargo, cuando mostramos un sentido del humor o bromeamos sobre esto, indirectamente enseñamos a los niños que tales temas no deben discutirse.
En cambio, necesitamos hablar claramente sobre el cuerpo.
El uso de los términos correctos permite a los niños hacer preguntas y decirles a los adultos en quienes se sienten confiables si se sienten incómodos o algo está «mal».
Podemos usar tiempos regulares, como bañarse o vestirse para introducir términos para ciertas partes del cuerpo, afirmando que es un área personal que debe ser atendida.
Además, también es importante explicar a los niños, de una manera fácil de entender, que hay ciertas cosas específicamente para adultos.
Esto no es para asustar al niño, sino establecer un límite seguro.
Por ejemplo, los padres pueden recordar a los niños que «la relación íntima es solo para adultos».
«No es para niños y nunca se ha permitido para adultos u otros niños que lo involucren en tales asuntos».
Si no está seguro de cómo comenzar una discusión, los libros para niños sobre el cuerpo y el tacto pueden ser una guía útil.
Aquí hay algunos libros en inglés sobre el tema que son adecuados para niños pequeños a estudiantes de primaria:
Entre los libros apropiados por edad incluyen Las reglas de mis pantalones para niños de jardín de infantes y preescolar; Respeto, consentimiento, límites y responsables para usted Para estudiantes de primaria; también Bienvenido a su período Para niños pregubernamentales.
Entre los títulos están Yusri y su secreto, Nina y su secretoY Sara dice ‘Tak Nak’Eso toca el tema de la seguridad personal y cómo lidiar con el abuso sexual.
Estos libros se leen y discuten mejor con niños de 8 a 12 años.
Enseñe a un niño justo sobre sus cuerpos
A menudo se les enseña a los niños a ser civilizados y seguir instrucciones para adultos.
Aunque los modales son importantes, a veces pueden hacer que no crean su propia intuición.
Es importante que los niños sepan que están en el poder sobre su propio cuerpo y tienen derecho a determinar qué se está sucediendo a sí mismos.
Esto refuerza el mensaje de que los derechos de su cuerpo son importantes, por lo que no tienen que abrazar, besar o tocar a nadie si se sienten incómodos, incluidos miembros de la familia inmediata.
Los padres pueden ofrecer alternativas como dar ‘High Five’, saludar o simplemente decir ‘Hola’.
Cuando confiamos en nuestros hijos, les ayuda a aprender a confiar en sí mismos.
Anímelos a escuchar su propia intuición y cuando algo se siente ‘mal’.
Dales una garantía con palabras como: «Si alguien te hace sentir incómodo o extraño, puedes decirle a tu madre/papá, incluso si la persona te dice que lo mantengas en secreto.
Esto ayuda a construir el coraje para que el niño hable cuando algo sale mal con ellos.
Lo más importante es que transmite el mensaje que los adultos escuchan, creen y los protegerán.
Diferentes secretos y shock
Desde la infancia, a los niños deben enseñarse que los adultos de confianza no les pedirán que mantengan secretos.
Del mismo modo, hay una diferencia entre secretos y sorpresas.
Las sorpresas suelen ser divertidas y temporales, como mantener un regalo de cumpleaños que se dará ese día.
El secreto implica algo que debe estar oculto durante mucho tiempo y puede hacer que una persona esté asustada, triste o deprimida.
Es importante decirle a niños como: «Puedes decirle nada a tus padres. No serás regañado, incluso si hay adultos que les dicen que lo mantengan en secreto».
Cómo escuchar, cosas que se pueden observar
A veces, los niños no saben cómo expresar lo que sucede o están demasiado asustados para hablar.
De hecho, hay niños que solo entienden las situaciones que se han sucedido cuando son adultos.
Una forma de hacer que su hijo se sienta protegido es recordarles que nunca son demasiado tarde para compartir con los padres si algo los preocupa.
Si el niño le dice algo que ha sucedido en el pasado, mantén la calma, escucha con atención y gracias por confiar en ti.
Si su hijo comparte algo preocupante:
- Respire profundamente y controle su reacción antes de responder
- Convencerlos de que crees lo que dicen
- Evite hacer demasiadas preguntas
- Concéntrese en el máximo cuando el niño dice
Obtenga ayuda profesional si es necesario, ya sea consultando a un médico, llamando a una línea de protección infantil o hablando con un experto en salud mental de confianza.
Sin embargo, no todos los niños hablarán directamente sobre el abuso, por lo que es importante prestar atención a algunos de los signos.
Estos incluyen cambios repentinos en el comportamiento, el uso de un lenguaje demasiado ‘maduro’, miedo a ciertas personas o lugares y cambios en los hábitos como la orina nocturna o las pesadillas.
Estos signos no necesariamente significan que se produce abuso, pero es una señal para preguntar suave y abierta y obtener ayuda si es necesario.
No tienes que hacer todo esto perfectamente.
Una breve conversación repitida de vez en cuando es suficiente para ayudar a proteger a su hijo y convencerlo de que siempre está ahí para escuchar.
El autor es psicólogo clínico calificado y profesor asociado en psicología en la Universidad de Deerin, Australia. Este artículo se publicó por primera vez en ‘The Conversation’, un sitio que publicó artículos basados en investigaciones y opiniones de expertos.